Esto se me ha ido de las manos...
¿Cómo han podido pasar 3 meses desde que publiqué una entrada relacionada con Harry Potter? Si son las que más me gusta escribir.
En estos últimos meses ha pasado de todo en el mundo mágico... Hermione es negra, habrá octavo libro, se confirma que Animales Fantásticos será una trilogía, nuevo parque en Hollywood, Pottermore ha cambiado su formato, nuevas figuras Funko...
El mundo mágico está en plena efervescencia tras unos años de letargo. Y vuelve cargado de cosas nuevas y emocionantes, pero también de polémica.
Como ya he comentado antes en este post con todas las noticias y novedades tengo sentimientos encontrados. Por una parte, mi potterhead interior se alegra de que el mundo mágico vuelva a estar vivo y está deseosa de ver todo lo que deparará esta nueva etapa. Y otra parte de mi siente miedo y decepción, porque no sabe cómo puede salir todo esto. Puede que con tantas novedades se pierda la esencia o deje de sentir la magia que sentí con la saga inicial.
Bueno, a lo que íbamos la verdadera receta de la cerveza de mantequilla. Y digo yo que será la verdadera porque casi todos en internet coinciden en que el sabor es igual a la que puedes encontrar en el parque de Orlando.
· INGREDIENTES ·
(Para cuatro personas)
1 litro de cerveza negra
100 g de azúcar
4 yemas de huevo
30g de mantequilla sin sal o 50 ml de nata para montar
1/2 cucharadita de jengibre en polvo
1/2 cucharadita de nuez moscada en polvo
5 clavos de olor molidos
· ELABORACIÓN ·
#1. Reservar 100 ml de la cerveza. Verter el resto junto con las especias en un cazo y calentar a fuego medio.
#2. Batir a parte las yemas con el azúcar hasta conseguir una crema espesa, esponjosa y de color claro.
#3. Cuando la cerveza esté caliente, sacar del fuego y añadir los huevos batidos con azúcar.
#4. Volver a calentar todo removiendo con unas varillas durante un par de minutos a fuego lento con cuidado de que los huevos no se cocinen.
#5. Agregar la mantequilla (o la nata en su defecto) y remover hasta que se derrita.
#6. Espumar la cerveza que separamos al principio con ayuda de un batidor de leche.
#7. Servir en una jarra y coronar con la espuma
Y ¡listo! Ya sólo tendrías que relajarte viendo Harry Potter para disfrutar plenamente de la receta. Espero que te haya gustado este post y que te animes a hacer la receta en casa. Si es así, no dudes enseñármelo o comentármelo en mis redes sociales (que están siempre en la barra lateral). Nos leemos pronto.
Travesura realizada, CaroPuppi