DECIR ADIÓS

¿A quién le gustan las despedidas? A mí no.

Decir adiós nunca es fácil, ni siquiera cuando sé cuándo volveré a verles.

Y me he acostumbrado a hacer maletas, comprar billetes y coger aviones, pero no. Uno jamás supera el vacío que la gente deja en ti. Aprendes a sobrellevarlo, pero siempre está ahí. 

Y así que con cada despedida, una parte de mí se queda con ellos, y me toca sobrevivir y rehacer este puzle que se sostiene unido gracias al pegamento de la esperanza de volver a verlos pronto.

Y ahora vuelve a empezar la cuenta atrás, paciencia, sólo quedan 94 días más...

Travesura realizada, CaroPuppi

Y tú.

Todos me miran y nadie me ve,

Todos me oyen y nadie me escucha,

Todos creen conocerme, pero nadie se ha preocupado en saber quién soy.

Me piden que cambie, pero nadie cambiaría por mí, 

Me usan a su antojo y cuando necesito ayuda: "¿Hay alguien ahí?" 

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Y llegas tú, devolviéndome la fe. 

Demostrando que se puede confiar en ti,

respetándome tal y como soy, 

y dando todo por seguir siempre junto a mi.

Travesura realizada, CaroPuppi