#1. GATITO
Idea sencillísima, muy abierta, porque te puedes poner casi cualquier ropa. Aunque si quieres un look más cañero estilo Rum Tum Tugger de Cats puedes optar por unos pitillos negros, una chaqueta de cuero, pulseras y collar de pinchos y cinturón de tachuelas. Lo imprescindible en este disfraz es el maquillaje: una mirada gatuna y unos bigotitos te convertirán en un minino. Y si no puedes hacerte con unas orejillas, basta con que te hagas dos moñitos. ¡Súper fácil!
#2. MIMO
Al igual que la anterior idea, podrás encontrar la mayoría de prendas y accesorios en tu armario (o en la caja de disfraces). Necesitarás una camiseta a rayas, un pantalón negro, unos tirantes rojos y unos guantes. En este caso vuelve a tomar protagonismo el maquillaje. ¡Con este disfraz conseguirás dejarlos a todos mudos!
#3. MARUJA
La que me parece la más original de todas. Preparada para no pasar frío durante las fiestas. ¿Porque quién no tiene en casa una bata bien calentita? Pues esto es lo que vamos a usar, una batita de andar por casa lo más hortera posible y lo vamos a acompañar de las babuchas más variopintas que tengamos. Con el maquillaje y el peinado tenemos que lograr la sensación de que hemos salido de casa sin previo aviso para poder enterarnos bien del cotilleo, así que nada mejor que "una mascarilla" y unos rulos.
Espero que les hayan gustado mucho estas ideas y que disfruten del carnaval por todo lo alto. Para más ideas de disfraces pincha aquí y aquí. Nos leemos en una semana, cuando haya conseguido quitarnos la mayor parte de la purpurina de encima.
Travesura realizada, CaroPuppi
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